5 tips para decorar tu hogar a prueba de perros
Seguro que cuando piensas en decorar tu hogar tienes ideas de estilos y colores que quieres incorporar en la decoración. ¿Pero estás teniendo en cuenta a tu mascota? Porque hay cosas que es mejor evitar, y otras que es mejor hacer cuando quieres impedir que tu adorada mascota arruine tu decoración. Con estos tips, ¡ambos serán felices!
1. Piensa como si tuvieras un niño
Quizá todavía no has tenido niños, de cualquier manera, antes de empezar a planificar la decoración de tu hogar investiga acerca de los cuidados que deberías tener si tuvieras niños pequeños y aplícalos con tu mascota. Por ejemplo una barrera que evite que entre a ciertas habitaciones o proteger los cables para evitar que los muerda.
2. Evita los colores claros
Una de las cosas más frustrantes es encontrar manchas de suciedad en las alfombras, cortinas y tapizados de color claro. Y cuando tienes un perro en casa, las posibilidades de que esto suceda se multiplican por mil. Por eso, y para evitar problemas, opta por colores oscuros o con estampados que puedan disimular la suciedad.
3. Cierra las puertas
Muchas personas se quejan de que sus mascotas se acuestan sobre el sofá o la colcha de la cama, cuando la solución es muy sencilla: cierra las puertas de las habitaciones a las que no quieres que tu perro entre.
4. Mantén todo ordenado
Si hay algo que a los perros les encanta, especialmente cuando son cachorros, es revolver y morder cosas. Así que a menos que quieras que mastique tus zapatos, revuelque tu ropa y destroce periódicos y papeles importantes, asegúrate de mantener todo ordenado.
5. Consíguele una cucha
Una buena forma de evitar que el perro se acueste en cualquier lugar, incluyendo esos lugares que tanto te molesta como el sofá y la cama, es conseguirle su propia cama o cucha. Sé que luego tendrás que entrenarlo para que duerma allí, pero es más fácil hacerlo cuando tiene un lugar propio que simplemente echarlo de donde no quieres que esté.
Como ves, no es difícil aplicar estos tips para decorar tu hogar a prueba de perros.