¿Cólicos muy fuertes? La posición de tu útero puede ser la culpable: cómo influye en tu salud
Generalmente, la posición del útero cobra relevancia cuando buscamos convertirnos en mamás. En ese momento es más probable que escuchemos términos como útero invertido, útero retroverso y en anteflexión. Sin embargo, la posición de tu útero también puede cobrar importancia más allá de si quieres embarazarte o no. Te explicamos.
La posición de tu útero
Tu aparato sexual se compone por varios órganos: ovarios, trompas de Falopio, cuello uterino, vagina y útero, justo este último puede estar acomodado en diferentes posiciones.
Generalmente, el útero o matriz, este órgano hueco en forma de pera invertida donde se desarrolla el feto, se encuentra inclinado hacia delante, de tal manera que se sitúa sobre la vejiga y la parte superior apunta hacia la pared abdominal.
Sin embargo, a pesar que esta posición, conocida como anteversión, es la más común, no es la única.
Variaciones en la posición del útero
En algunas mujeres el útero está erguido, es decir, la parte superior en lugar de apuntar hacia la pared abdominal, lo hace totalmente hacia arriba.
En otras, la matriz no sólo se sitúa sobre la vejiga sino cae sobre ella, lo cual ocasiona que se hable de un útero en anteflexión, lo cual puede ocasionar que orines con más frecuencia.
Otra variación normal bastante común es la del útero invertido, también conocido como útero retroverso, en retroversión o ladeado, en donde tal y como su nombre lo dice, el órgano está en posición invertida a la más común.
Es decir, está inclinado hacia atrás en lugar de hacia delante, lo que ocasiona que la parte superior apunte hacia el recto y no hacia la pared abdominal, según explican los expertos de Better Health, el sitio oficial del Departamento de Salud y Servicios Humanos del Gobierno de Australia.
El útero invertido es más común de lo que imaginas. La Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., explica que 1 de cada 5 mujeres presenta esta posición en su anatomía.
Tener alguna de estas variaciones en la posición de tu útero puede ser simplemente porque así naciste o por el paso del tiempo. Cuando una mujer experimenta la menopausia, muchas veces los ligamentos pélvicos se debilitan, lo cual puede ocasionar que el útero cambie su posición de adelante hacia atrás.
El embarazo es otro proceso que también puede debilitar los ligamentos y ocasionar que este órgano se incline hacia atrás.
Los fibromas, bultos no cancerosos, pueden también modificar su posición. Del mismo modo, condiciones y afecciones médicas como procesos inflamatorios, endometriosis o enfermedad inflamatoria pélvica pueden causar cicatrices que cambian la forma y ubicación de la matriz.
¿Tener una de estas posiciones en el útero me afecta?
La mayoría de las mujeres que tienen una posición de útero diferente a la anteversión realmente no presentan ningún síntoma que les advierta que así está su anatomía interna. No obstante, en algunos casos sí puede existir dolor o incomodidad en ciertos momentos.
Una de las molestias más comunes es el dolor durante el periodo menstrual. Un estudio encontró que entre más inclinado esté el útero es más probable que sean más dolorosos los periodos.
Asimismo, se puede experimentar dolor durante el sexo, principalmente si la actividad sexual es bastante profunda o enérgica. Los expertos de Better Health agregan que la posición en donde la mujer va arriba o encima suele causar la mayor incomodidad.
Otras molestias que la posición invertida del útero puede ocasionar son incontinencia, problemas para ponerse tampones e incluso, dolor al evacuar debido a la presión que ejerce el útero sobre el recto, misma presión que puede provocar un poco de estreñimiento.
En el pasado se creía que el útero invertido podía ser un factor de infertilidad. No obstante, hoy en día existe evidencia que esto no es cierto: la posición del útero invertido no afecta o influye en la capacidad de tu cuerpo de quedar embarazada.
¿Cómo conozco la posición de mi útero?
Mediante un examen pélvico de rutina, tu ginecólogo puede saber en qué posición está tu útero. En algunos casos, para evitar confundir un útero ladeado con una masa pélvica o un fibroma en desarrollo se pueden hacer otras exploraciones como un examen rectovaginal o un ultrasonido.
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