Yamelí culminó su venganza: esto es lo que sucedió en el gran final de La Reina Soy Yo
Después de ser víctima de la traición más terrible, Yamelí recuperó su vida, su pasión por la música y el amor por su familia. A su vez, Charly recibió el castigo que a lo largo de la historia había evitado. Descubre todo lo que pasó en el gran final de La Reina Soy Yo.
Le perdonó la vida
Al verse sin salida y con todos sus crímenes al descubierto, Charly optó por secuestrar a Yamelí para obligarla a retractarse de todas sus denuncias. Sin la menor piedad la amenazó de muerte y la llevó a una cabaña poco conocida y alejada de la ciudad.
Sabiendo de la peligrosidad que representaba, ella trató de convencerlo de que todo cambiaría y que juntos podrían limpiar su nombre e imagen. Pero todos sus intentos fallaron, pues el cantante la ató a una silla no sin antes besarla por la fuerza.
Para buena suerte de Yamelí, Vanessa decidió colaborar con las autoridades para dar con el paradero de su padre. Alertado con la ubicación, un comando de la policía llegó a la guarida del artista para arrestarlo. Viéndose sin escapatoria, amenazó con asesinar a Yamelí, quien se libró de él mordiéndole un brazo.
Charly decidió darse por vencido y permitió que lo esposaran. En ese mismo instante Yamelí tomó una pistola de los policías y la apuntó contra el hombre que había arruinado su vida. La angustia se apoderó de todos los presentes. La vida de Charly ahora se encontraba en manos de Yamelí, quien deseaba ponerle punto final a su venganza.
Testigo del enfrentamiento, Erick se acercó a su madre para persuadirla de no mancharse las manos de sangre. Tentada a jalar del gatillo, un mundo de sufrimiento recorrió la mente de Yamelí, quien finalmente decidió perdonar la vida de su gran verdugo. Así, Charly fue arrestado formalmente y trasladado a una prisión.
El castigo esperado
Luego de una vida de mentiras y de trampas, Charly purgaba una larga condena en la cárcel. Su madre lo visitó para reconfortarlo y para compartir la culpa de su destino. Pero lo que más le dolía a la exestrella musical era el rechazo de su hija Vanesa, quien dos años atrás lo visitó para reclamarle por la muerte de su madre y por el sufrimiento que causó.
Charly se marchó paso a paso hacia su celda. Destrozado por la soledad, no tuvo más remedio que encontrar consuelo entre sus lágrimas.
Nació una nueva estrella musical
Tras encontrar paz en su corazón, Yamelí le dio rienda suelta a su talento y con el apoyo de Juanjo logró convertirse en una súper estrella musical. Sobre el escenario demostró todo su poder y energía como cantante y compositora. Además, pudo hacer su sueño realidad y compartir micrófonos con su hijo Erick.
Juanjo no se quedó atrás y le preparó una amorosa sorpresa a Yamelí. En compañía de su guitarra, le cantó una canción especialmente para ella. También Carlos Vives y todo su vallenato aparecieron en la gran noche del concierto para celebrar su amor.
Así fue como la vida de Yamelí encontró dicha, tranquilidad y amor, y pudo gritar con fuerza: La Reina Soy Yo.