"Quedó atrapado": mexicano de 60 años muere en medio de una carrera ilegal de autos en LA
Humberto Hernández, un inmigrante mexicano de 60 años, despertó el sábado pensando quedarse a descansar en casa. “No tengo ganas de trabajar”, le dijo a uno de sus hijos. Su plan era anticipar la celebración por el Día del Padre, para la cual su familia había preparado un festejo en una presa de Los Ángeles, California. Finalmente ganó su responsabilidad: se puso el uniforme y se fue al trabajo.
Cuando le faltaban pocas cuadras para llegar le avisó a su jefe que iba en camino. Pasó tiempo y jamás se presentó. Su patrón se preocupó al leer en una aplicación la noticia sobre un choque que ocurrió en la esquina de las avenidas Melrose y Highland, en Hollywood. En una foto se observada un auto compacto color blanco casi desecho. Hernández había resultado gravemente herido.
“Quedó atrapado en el carro, estaba completamente comprimido. Llegó al hospital aún con vida, pero tenía dificultades para respirar”, contó su esposa Alejandra Félix, en una entrevista con Univision Noticias. “La arteria se había roto y estaba desangrándose por dentro. Recibió un golpe muy duro en el pecho. Trataron de revivirlo, pero no pudieron”, lamentó ella.
Félix llegó al hospital en cuanto pudo y a las 11:08 am varios médicos del hospital Cedars-Sinai le dieron la peor noticia que ha recibido en su vida. El hombre del cual se enamoró en Veracruz y con quien tuvo tres hijos, había fallecido unos minutos antes por las lesiones del aparatoso accidente.
“Teníamos planeado que el domingo no iba a trabajar. Íbamos a ir a la presa Santa Fe. Era la primera vez que sus tres hijos iban a hacerle su fiesta en grande… y ya no lo pudieron festejar”, dijo Félix con pesar.
La ahora viuda dice que la Policía de Los Ángeles (LAPD) le indicó que está investigando el choque como resultado de una carrera ilegal de autos. “Jugando carreras se pasaron la luz (roja del semáforo) y perdieron el control. Un carro golpeó de lleno al de mi esposo y lo aventó hacia un árbol”, describe.
Un agente de la División de Tráfico en la región Oeste del LAPD confirmó a este medio que un detective investiga el incidente en el que falleció Hernández, pero no proporcionó más información.
Félix aseguró que la Policía le notificó que habían arrestado al conductor del vehículo que impactó al auto su esposo. “Mis hijos quieren que le den el mayor castigo posible. Es un crimen. Ellos están muy enojados con la vida, porque su papá no tenía que morir así”, dice ella.
Una “epidemia” en California
En el sur de California son tan comunes las tragedias ocasionadas por carreras clandestinas de coches, que la Policía las considera una “epidemia”. Hace unos días una mujer de 57 años perdió la vida después de que su auto fue embestido de frente durante un “arrancón” en San Diego; el 9 de junio dos personas fallecieron por cruzarse en el camino por donde corrían un Dodge Challenger y un Toyota Corolla en Palmdale; y a finales de mayo una mujer de 28 años murió y cinco personas resultaron heridas por el impacto entre vehículos que competían a gran velocidad en Reseda.
La noche del 22 de febrero pasado alguien grabó cómo un deportivo que “hacía donas” en una calle del Valle de San Fernando casi le amputó la pierna a una mujer y huyó de la escena, informó el reportero Oswaldo Borraez de Univision Los Ángeles.
Moisés Castillo, un detective retirado de la división de tránsito del LAPD, dijo que en ocasiones estas competencias clandestinas escalan a tiroteos y pleitos con navajas. “Es algo que incluye a pandillas, drogas, gente que solo va a buscar pleito”, dijo al mismo canal.
En los últimos 20 años más de 170 personas, la gran mayoría conductores y pasajeros, perdieron la vida en carreras ilegales que se realizaron en el condado de Los Ángeles, según las autoridades.
La viuda de Humberto Hernández le envía este mensaje a los jóvenes que participan en estas. “Ya no lo hagan. Tóquense el corazón. Ponen su vida y la de otras personas en peligro. A mí me dejaron sin esposo, a mis hijos huérfanos y a sus nietos sin abuelo. A ellos los meten a la cárcel y tienen la opción de rehacer su vida, pero mi esposo está en la morgue y al rato bajo tierra”, expresó Félix.
Ella afirma que su marido jamás causó un accidente. “Da coraje porque era un conductor muy cuidadoso”.
La última conversación que ambos tuvieron fue el viernes por la noche. Félix abrió una carta la cual le ofrecían un seguro de vida. “Sería bueno agarrarlo. Para que mis hijos tengan dinero al menos para enterrarnos”, recuerdo que fueron sus palabras antes de irse a dormir.
Ahora la familia Hernández está haciendo una colecta en internet para cubrir los gastos funerales. A la fecha han recibido poco más de 1,800 dólares, que es solo una parte del costo total. El patriarca será enterrado en el cementerio Holly Cross de Pomona. Aún no hay fecha para el sepelio.
